Manejo de equipos en una época de disrupción digital

Uno de los desafíos más difíciles para las empresas cuando están experimentando una transformación digital es superar el "sistema inmunológico corporativo". Las organizaciones perciben a menudo nuevas iniciativas, nuevas personas y nuevas tecnologías como una amenaza; por tal motivo, las empresas crean naturalmente "anticuerpos" que matan las iniciativas de cambio nacientes. 

El proveedor de telecomunicaciones holandés KPN era muy consciente de este riesgo y creó desde cero un brazo de innovación independiente, encargado de crear una nueva infraestructura de TI e interfaz de cliente. Esta entidad separada de alrededor de 30 equipos de scrum funcionó en modo sigiloso durante seis meses, dándoles la libertad y autonomía para funcionar en "modo de puesta en marcha", con formas más rápidas de trabajar y menos burocracia corporativa que atravesar. KPN también cambió sus prácticas de contratación para atraer mejor a los desarrolladores de software estrella al proyecto.

Hasta ahora, la transformación digital de KPN le ha ahorrado a la empresa 450 millones de euros después de tres años. En el lado del cliente, el Net Promoter Score de KPN también mejoró en 20 puntos.

Nuevas generaciones: mezcla de lo antiguo y lo nuevo en un mundo digital

A medida que las generaciones más jóvenes se unen a la fuerza laboral, las empresas se están dando cuenta de que deben ajustar muchos procesos internos para aprovechar las fortalezas de estos nativos digitales. Los millennials y la Generación K, han alcanzado la mayoría de edad en la era digital por lo que aportan a la fuerza laboral nuevas habilidades y nuevas mentalidades. Comprender estas cualidades únicas es el primer paso para que las empresas creen una fructífera combinación generacional.

Sin embargo, los modelos de liderazgo divergentes entre las generaciones mayores y las más jóvenes crean inevitablemente tensión en las relaciones de gestión del día a día. Muchas empresas están lidiando con cómo dar retroalimentación constructiva a los millennials en el contexto del desarrollo del desempeño. 

Pascal Wicht, a través de su enfoque etnográfico para comprender a los millennials, ha llegado a la conclusión de que el mejor método para la retroalimentación y el desarrollo del desempeño con los millennials es crear una conversación continua con controles semanales, en lugar de realizar evaluaciones formales del desempeño. 

Sin embargo, es importante que los jefes amplifiquen el desempeño positivo, ya que los millennials son particularmente sensibles a los comentarios negativos sobre el desempeño. Luego, como segundo paso, los gerentes pueden ayudar a definir soluciones para los aspectos más débiles y, por lo tanto, asumir un papel de coaching más inspirador.

En Educación Ejecutiva de UTEC, desarrollamos experiencias a la medida para abordar temas como este y otros, buscando el crecimiento organizacional y de los colaboradores. Conoce más de nuestros programas a la medida para empresas aquí.

* El artículo es una adaptación del artículo “Developing people in a time of digital disruption”. Marzo 2019, IMD articles.