Blog UTEC

Todas las novedades

y mucho más

Las 4 claves del Mindset

Compartir

Las 4 claves del Mindset

Compartir

¿Cómo se forma nuestro mindset?

El mindset está directamente influenciado por todo lo que experimentamos, vemos y escuchamos, y lo que creemos que es verdad: nuestras creencias. El término se hizo popular con el libro Mindset – La actitud del éxito; de la autora y reconocida psicóloga Carol S. Dweck.

Prepara a tu equipo laboral: ¿Qué son las experiencias a la medida - In Company y cuál es su importancia?

Después de décadas de investigación sobre los logros y el éxito, Carol presenta el concepto de mindset, que se muestra responsable de cómo cada persona ve la vida. Sus investigaciones científicas indican que a una mentalidad fija le costará crecer, mientras que una inteligencia de crecimiento, aquella que está dispuesta a aprender, tiene más probabilidades de alcanzar grados de éxitos en la vida. La autora también explica cómo el mindset puede influir en la vida de cualquier persona, especialmente de manera positiva. “En una mentalidad fija, la gente cree que sus cualidades básicas, como la inteligencia o el talento, simplemente ya están fijas en sus rasgos personales. Pasan el tiempo de su vida documentando su inteligencia, en lugar de desarrollarla. Y a los que creen que tienen talento, es posible que crean que este sobrevive sin esfuerzo. Pero están equivocados", asegura Dweck.

Leer también: El UX puede cambiar el Mindset empresarial

Tipos de Mindset

A través de la investigación realizada, Dweck presenta dos tipos de mentalidad: mindset fijo y mindset de crecimiento. A continuación, conoce los puntos principales y las diferencias de cada uno:

1. Mindset fijo

Las personas con una mentalidad fija creen que las cualidades básicas, como la inteligencia y el talento, son rasgos fijos y no se pueden cambiar, tanto en la vida profesional como en la personal. A menudo, exhiben un comportamiento pesimista e inseguridad, buscando elogios y palabras de afirmación. Además, creen que el fracaso es algo que se debe evitar a toda costa y creen que, si algo sale mal, es mejor ni siquiera intentarlo. La perfección es algo que la mentalidad fija busca todo el tiempo. Y esto es algo que se forma desde los primeros momentos de nuestra vida.

2. Mindset de crecimiento

La mentalidad de crecimiento, como su nombre ya lo indica, cree que es posible desarrollar nuevas habilidades, talentos y dones a lo largo del tiempo como resultado de la fuerza de voluntad, el compromiso y la dedicación. Las personas con un mindset progresivo saben que las dificultades pueden convertirse en oportunidades, así como la inteligencia es algo que se puede desarrollar con dedicación y esfuerzo. Por lo tanto, son individuos que aprovechan los desafíos para desarrollar habilidades potenciales, de una forma que una persona de mentalidad fija no lo conseguiría. Sin embargo, Dweck explica en el libro que el mindset no se trata solo de creer que puedes hacer lo que quieras con esfuerzo. Al fin y al cabo, no todos se convertirán en el próximo Einstein con solo intentarlo. La mentalidad progresiva se trata de vivir lo que es potencialmente posible. Esta actitud estimula la búsqueda de desafíos y el aprendizaje constante.

Leer también: Permear el nuevo Mindset en la organización

Entonces, ¿cómo lograr ser una persona exitosa y feliz poniendo en práctica el cambio de mindset? Puedes poner estas 4 claves en práctica:

1. Sé consciente de la voz de tu mentalidad fija: Al acercarse a un reto, dicha voz enjuicia y puede decir: "¿Estás seguro de que puedes hacerlo? Tal vez no tienes el talento necesario". O bien: "¿Qué pasa si no puedes? Será un fracaso. La gente se reirá porque pensaste que tenías talento". El Mindset escucha esa voz interna y opta por superar el límite del juicio y buscar lo posible.

2. Siempre hay opciones: ¿Cómo se interpretan los desafíos y la crítica? Una opción es interpretarlos con una mentalidad fija: no hay talentos ni habilidades para lograrlos. O bien, se puede interpretar la realidad a partir del crecimiento: qué necesitas, qué estrategia, esfuerzos y amplitud de capacidades se deben desarrollar para dar el salto.

3. Habla con la voz de lo posible: Una mentalidad fija, al acercarse a un desafío, de inmediato dice: "¿Estás seguro de que puedes hacerlo?". Una mentalidad de crecimiento diría: "Puedo aprender con el tiempo y el esfuerzo".

4. Optar por lo posible: La excesiva preocupación de una persona encerrada en una mentalidad fija, le impide realizar movimientos audaces visionarios. Este tipo de personalidad interpreta la realidad a la defensiva. En cambio, el hábito de creer en lo posible, crea una mentalidad de crecimiento y le da una oportunidad al logro.

El éxito es un resultado directo de tu mentalidad

Muchos piensan que el éxito solo lo alcanzan aquellos que tienen mucho talento o mucha suerte. Pero, el éxito depende de cómo manejes las nuevas situaciones. ¿Quieres programar tu cerebro para el éxito? ¡El primer paso es aprender a conocer cosas nuevas, sin temor a cometer errores!

Publicado el: 
03 de Febrero